Cuando el contenido digital que publican en redes sociales influencers, youtubers, instagramers, twitteros, o distintos famosos y personas púbicas, implica un contenido publicitario, es importante conocer cuando es legal y ajustado a derecho y cuando no. En Argentina no tenemos una legislación específica aplicable a publicidad digital por redes sociales, pero eso no significa que no tengamos un marco legal para guiarnos a la hora de publicar un contenido publicitario, y asegurarnos que los contenidos sean legales, transparentes y no perjudiquen a los consumidores y usuarios.
A continuación se enumeran algunas cuestiones que es bueno tener en cuenta, tanto por consumidores como por influencers, para conocer cuando el contenido digital publicitario es ajustado a derecho o no.
1) Toda publicidad deberá evitar una práctica desleal y denigratoria de la reputación de otras personas, entidades y marcas. Los anuncios deben ser sinceros y verificables. Asimismo, los mensajes solo pueden incluir testimonios o recomendaciones auténticos, basados en la experiencia de quien los presta.
2) En caso de mencionarse una marca, empresa o institución se debe pedir el permiso de la misma. Es sabido que hay muchos casos de influencers simulando contenido pagado en instagram por ejemplo, para así aumentar su estatus o mejorar su imagen, y esto importa un comportamiento considerado muchas veces negativo para la imagen o reputación de la marca en cuestión que nunca solicitó ese tipo de publicidad.
3) En caso de posts patrocinados, se aconseja (y en muchos países ya se exige) la incorporación de los hashtags #ad #sponsored #publicidad o similar, y mencionar expresamente al anunciante. Esto está ligado al principio de identificación de la publicidad, ya que el consumidor debe poder identificar cuando un contenido es publicitado, atento a que solo de esa forma puede interpretar el grado de libertad que el influencer ha tenido al promocionar determinado producto y servicio, y no se confunda con otro tipo de contenido (no publicitario). En caso contrario se entiende el contenido publicado implica una publicidad encubierta y en muchos países se aplican importantes multas en caso de no hacerse estas aclaraciones.
4) Deberan canalizar los contenidos dentro de los parámetros de la publicidad RESPONSABLE, dado que ante la imposibilidad de aplicar sobre los usuarios que acceden en redes al contenido del usuario que lo publica, estos pueden llegar a menores o a personas sin el discernimiento suficiente para una correcta interpretación de mismo.
5) En la actualidad se detectaron muchos casos donde eventos promocionados por influencers resultaron ser estafas, o donde se promocionaron productos que pusieron en riesgo la salud de los seguidores, y es muy común ver a personajes públicos o influencers, que sugieren dietas nutricionales, productos adelgazantes, rutinas de ejercicios sin título habilitante y/o sin estar respaldados por profesionales. En promociones de alimentos, bebidas alcoholicas, espectáculos, medicinas y tratamientos, tabaco y cigarrillos por ejemplo, debemos ser especialmente cuidadosos ya que hay legislación particular que regula la publicidad de estos productos y servicios, justamente por lo delicado que resulta su promoción, y más en el contexto de masividad de llegada a los consumidores y usuarios que tienen las redes sociales hoy en día.
Todos estos puntos, están ligados al principio de publicidad responsable, que considero marca las pautas mínimas que deberán cumplir los anunciantes e influencers y asimismo, hacer valer los consumidores, para defender tanto los derechos de libertad de expresión comercial de los anunciantes como los derechos a la información veraz y transparente de los consumidores.
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